Por el 1/2 ambiente

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Todos podemos aportar nuestro granito de arena para proteger el planeta . Pensar en verde no es tan difícil como parece. A continuación te ofrecemos la manera de reverdecer  tu rutina diaria. Todo comienza cuando apagas el despertador...

1. El próximo despertador que te compres que sea solar, no eléctrico.
2. Utiliza una máquina de afeitar eléctrica o manual con cuchillas de repuesto en lugar de las desechables. Será una gran ayuda para reducir desechos. No permitas que corra el agua mientras te estás afeitando, lavando la cara, o cepillando los dientes. ¡Ahorras mucha agua!

3. Después de leer el periódico encárgate de reciclarlo. Para los amantes del zumo, la próxima vez que te toque hacer la compra busca los zumos que vienen en envases reciclables, nunca en individuales. Y cuando salga de casa, no olvides apagar todas las luces  y aparatos eléctricos. Incluso desenchufa los que se mantienen en stand by, continúan consumiendo aún cuando no están siendo utilizados. Ahorrar energía ayuda a reducir la polución del aire.

4. Para ir al trabajo, la manera más fácil de reducir tu huella de carbono es evitar las prisas. Así que disminuye la velocidad . Aunque lo ideal sería montar en bicicleta, caminar, viajes compartidos con compañeros, transporte público... Si no puedes prescindir del vehícul, al menos mantén los neumáticos inflados a la presión correcta, contamina menos.

5. Una vez en el trabajo, si necesitas apuntar algo, voltea un antiguo documento y escribe en la parte de atrás.

6. Recicla la basura en el trabajo, en el colegio y en casa. Esta es una de las acciones que más contribuyen a reducir el calentamiento global . De hecho, se estima en actualidad sólo el 25% de lo que arrojamos a la basura es reciclado.

7. Para personalizar tu área de trabajo, busca una planta , además de decorar, ésta elimina cantidades contaminantes  presentes en el aire.

8. En los meses más calurosos de verano, utiliza un ventilador interior junto con el aire acondicionado para expandir el aire fresco por toda la casa. Ahorras electricidad.

9. Cuando cocines la cena, utiliza un recipiente del tamaño del elemento calorífico para disminuir el consumo de energía.

10. No arrojes la ropa limpia en la cesta de la ropa sucia para evitar colgarla. ¡Ahorras agua! Utiliza los pantalones más de una vez. Y cuando laves, utiliza sólo productos ecológicos.

¡Es mejor para ti y el medio ambiente!

De la Revista GEO © SXC, Texto: Ana Palicio

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